El guisante de olor, Lathyrus odoratus, es una especie mediterránea que se caracteriza por el aroma y el aspecto colorido de sus flores. Se trata de una trepadora que precisará de tutores para elevarse del suelo aunque también hay variedades de menor crecimiento que son excelentes para su cultivo en cestas suspendidas.
Es una planta originaria de la zona mediterránea por tanto precisa de temperaturas suaves. Sus flores son muy decorativas y tienen un buen uso como flor de corte. Vamos a ver cómo podemos cultivar esta preciosa planta desde semillas en nuestro jardín.
En el mercado encontraremos semillas de guisante de olor en muchos colores de floración y en distintas alturas de planta. También losuente hay tempranos y tardíos con lo que podemos extender el cultivo desde la primavera al otoño. Si iniciamos la siembra mediante semillas lo haremos en interior y trasplantaremos al exterior una vez entrada la primavera. Prefiere las temperaturas frescas y es de muy rápido crecimiento.
El guisante de olor precisa de un suelo rico en humus y bien drenado. La localización es importante, necesita un lugar soleado pero con sombra durante las horas centrales del día ya que una excesiva exposición al sol no le irá nada bien.
Como trepadora que es necesitará que le proporcionemos algún tipo de apoyo donde pueda enredar sus zarcillos. La forma clásica de cultivar el guisante de olor era clavando tres ramas de avellano alrededor de cada planta aunque ahora podemos encontrar distintos tipos de mallas y redes para esta misión. Fructifica en vainas como su pariente el guisante comestible pero sus semillas son tóxicas y no deben consumirse.
Fuente guiadejardineria.com
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