Cualquier decorador de interiores le hará la misma recomendación, añadir plantas al diseño de cualquiera de las estancias de la casa le aportará un toque de frescura y color. La elección de la planta que usted escoja para cada habitación dependerá de su gusto, del resto de la decoración y de las condiciones que dicho espacio ofrece a la planta. Es importante el color y la apariencia de la planta pero también es imprescindible que el lugar elegido reúna las condiciones ideales para que la planta pueda vivir y desarrollarse. Si una planta precisa luz solar no podrá colocarla en un lugar oscuro, en cambio una planta que precise sombra no podrá colocarla junto a una ventana donde reciba luz solar directa.
El anthurium o anturio es una planta grande que puede alcanzar casi el metro de altura y unos 60 cm de anchura. Es excelente para llenar un espacio grande y luminoso pero sin sol directo. Los anturios pueden ser de color rojo, rosa, lavanda y blancos con lo que podemos escoger el color más adecuado para nuestra decoración. Necesitan una temperatura ambiente entre 18ºC y 30ºC.
Cuando pensamos en los desiertos imaginamos espacios inertes y monocolores poblados de ásperos cactus. Pero los cactus también florecen y sus flores, tal vez por contraste, son sorprendentemente hermosas y llamativas. Un cactus podemos colocarlo en cualquier lugar donde reciba una buena cantidad de luz solar directa. Son además resistentes y no precisan riegos constantes.
Las poinsettias o flor de pascua es una planta que identificamos con la Navidad pero ello no quiere decir que no podamos tener ponsettias durante todo el año. Las hay que distintas coloraciones de hojas y sus flores también son muy hermosas. Además conseguir las hojas de color puede ser todo un reto para nosostros pues es una planta bastante delicada.
Hasta el más negado para la jardinería podrá lucir un espléndido geranio en su casa, son fáciles de cuidar y resistentes. Hay geranios en muchos colores y además es una planta fragante que perfumará la estancia donde la coloquemos. Sólo necesita sol en abundancia y controlar los riegos para que la planta no sufra por exceso de agua.
La gloxinia es una pariente de la violeta africana, sus hojas son muy parecidas así como la estructura de la planta, sus flores en cambio son acampanadas y más grandes que las violetas. Prefiere los lugares semisombreados y florece en primavera o finales del invierno.
Un jazmín dispuesto en un espacio grande, es una planta trepadora que puede crecer bastante, con riegos regulares y constantes puede decorar al tiempo que nos regalará con su profundo aroma.
El kalanchoe es una suculenta que florece de forma exuberante y llamativa. Como todas las suculentas es muy fácil de cultivar y resistente. Para lugares luminosos y cálidos es una opción perfecta si no somos queremos estar muy pendientes de las plantas.
Los lirios son una elección decorativa muy interesante y nos ofrecen tal variedad de colores y cuidados que podemos adaptarlos a cualquier situación. Según las circunstancias de nuestro espacio escogeremos unas u otras.
Las orquídeas, con sus 30.000 especies diferentes, nos ofrecen un amplio abanico para elegir. Estéticamente son una de las plantas más atractivas para una decoración moderna, en cambio son plantas muy delicadas y que requieren grandes cuidados.
La violeta africana es una planta colorida, fresca y con muchas posibilidades en decoración. El intenso color de sus flores y de sus hojas pueden crear un buen efecto de contraste en una decoración basada en colores neutros. Es muy agradecida, junto a una ventana donde reciba luz y calor, riegos cuidadosos sin mojar las hojas y poco más. Ella nos ofrecerá sus hermosas flores durante todo el año.
Via guiadejardineria.com
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