Preparación y plantación de hortalizas en el huerto

Ahora en primavera, sobre el mes de mayo, podemos plantar en el huerto todo tipo de hortalizas: tomates, judías, berenjenas, pimientos, acelgas, lechugas, apionabo y/o perejil.

Antes de plantar las hortalizas en la huerta, hay que preparar bien la tierra y realizar una enmienda orgánica, incorporando materia orgánica para mejorar la textura y estructura de la tierra. Para conseguirlo utilizaremos un mantillo.

Después hay que abonar la superficie para garantizar el crecimiento de las hortalizas. En la huerta hay que utilizar siempre un abono natural, ya que todo lo que se produzca servirá como alimento.

Una vez esté la tierra preparada hay que poner las estructuras que sujetarán los tomates y las judías durante su crecimiento. Para ello, crearemos estructuras con forma de tiendas de campaña con palos de abellano.

Colocaremos los tomates y las judías en la base de los palos, plantando una hortaliza por cada uno. Además de los tomates, las berenjenas, las acelgas y los pimientos cogerán bastante altura por lo que podemos colocarlos en el centro del huerto. Se puede realizar una plantación geométrica, poniendo todas las hortalizas en orden y por grupos, o también una plantación desordenada, aleatoria, para conseguir un efecto más estético y ornamental.

También podemos plantar lechugas rojas y lechugas verdes, apionabo y perejil en el perímetro del huerto.

En algunos lugares, en función del clima, puede ser un poco temprano para plantar pimientos, que necesitan bastante calor para crecer. No obstante, podemos protegerlos utilizando unas botellas grandes de plástico como pequeños invernaderos. Sólo hay que cortar el culo de la botella, quitarle el tapón, y tapar con ella el pimiento.

Fuente: hogarutil.com